Una tarjeta de presentación destacada.
Cuántas veces no has conservado la tarjeta de presentación de alguien en particular o que has conocido en una visita comercial y te has visto incluso en la penosa situación de dar tu contacto en una nota o prometer mandar mensaje a la brevedad mientras en tus manos ya tienes un distintivo personal que además tiene un gran diseño.
Las tarjetas de presentación han sido desde el siglo XVII una herramienta de distinción y protocolo en toda reunión social, comercial y de negocios. Recordemos que la manufactura puede ser tan diversa como sus diseños, desde aplicadas con grabados y serigrafía hasta masivas impresas en método offset y ahora las hay en formato digital a través de códigos de escaneo. Sin embargo el contar con unas cuantas impresas en el bolso o la cartera siempre es oportuno.
Pero, ¿qué hace a una tarjeta de presentación ser destacada? Primeramente poder distinguir el nombre completo del propietario de forma clara e inmediata para recordarlo y en casos particulares escribirlo o pronunciarlo correctamente, reconocer la imagen corporativa de la marca que representa si es el caso tanto en sus colores como en su formato obedeciendo a su respectivo manual de imagen institucional, hay quienes llevan todo un protocolo de inserción al respecto. Otros elementos son la ubicación de datos de contacto como son el cargo profesional, teléfonos ya sean de oficina y/o móvil, correo electrónico y posteriormente dirección completa de oficinas o incluso solamente un sitio web donde consultar otras localidades.
Adicionar más elementos puede generar un diseño saturado y excedente de información, en muchos casos el sitio web será el vinculo con nuestro ecosistema digital donde tras su visita se podrán ubicar las redes sociales correspondientes y otras herramientas. Muchos estilos se distinguen por imprimir ambas caras y colocar la imagen de la marca en una de ellas, lo que las hacen más representativas empleando contrastes de logo y fondo.
En la actualidad un elemento que cobra más fuerza en las tarjetas de presentación son la inclusión de medios digitales y realidad aumentada donde a través de códigos QR o elementos escaneables trasladan a los usuarios a una experiencia directa con multimedias representativos de la marca desde un enlace de campaña o apps de contacto hasta incluso un video corporativo o de presentación personal ¡Todo es posible aprovechando el espacio del formato sabiéndolo proporcionar armoniosamente!
Por ello la próxima vez que solicites una producción de tarjetas de presentación, piensa en la gran impresión que puedes dar con ellas y el alcance digital en tus manos para trasladar a lo mejor de tu marca, negocio o servicios.
Y por favor, nunca olvides llevar contigo unas cuantas en un elegante tarjetero, nunca sabes cuándo puedes estar cerca de una gran oportunidad de negocios.